Cuando llegué a la cocina en la planta baja de mi casa, tome un vaso de la alacena, abrí la heladera y me serví un poco de leche fresca, tomé unas galletitas dulces de un frasco de vidrio que había sobre la mesada y por la ventana balcón que había en esa habitación, salí hacia el amplio patio de mi casa para desayunar allí.
Me senté en una reposera que puse bajo el gran pino que había en el jardín mirando hacía la pileta que teníamos, donde dos pajaritos intentaban tomar agua desde el borde, y tome un sorbo de leche. A penas acerque una galleta a mi boca escuché que el teléfono comenzaba a sonar, deje mi desayuno sobre el piso y rápidamente corrí hacia el living para atender antes de que mi hermano se despertara.
-Hola -conteste algo agitada por la corrida que acababa de hacer -¿Quién habla?
- Hola Pau. Soy Zai. ¿Cómo andas? -me respondió mi mejor amiga desde el otro lado de la línea.
- ¡Zai! Todo bien, ¿vos? - Me alegré al escuchar su voz y sonreí.
- Bien, gorda. ¿Tenes ganas de ir al club hoy? ¡Cómo cuando teníamos 15! Porfa -La escuche muy entusiasmada. Seguramente se había enterado que uno de los chicos que había terminado el colegio hacía ya un año y tanto le gustaba iba a estar en el club.
-Obvio. ¿Por algún motivo en especial la prisa por ir hoy? -reí y escuche que ella también lo hacía. Creo que había acertado con mis suposiciones.
-Va Nico -me contestó en un susurro, seguramente para que sus papas no la escuchara. No era que le fueran a hacer algun drama o que el papá fuera celoso pero Zai era muy vergonzosa con las cuestiones del amor y yo la respetaba.
-Lo supuse -volví a reír- avisale a Flor y las paso a buscar tipo 2. ¿Sí?
Zai vivía a dos cuadras de mi casa y Flor a 5, ambas me quedaban de pasada cuando iba camino al club (este se encontraba a 7 cuadras de mi casa).
- Dale, genial -Aceptó-. Che, la fiesta de despedida de Martin, ¿es este viernes? ¿O el sábado?
-El viernes es -Le confirmé-. Obvio que vamos, ¿no?
- Si, quería saber bien que día era... Porque el sábado no iba a poder ir. ¿Te acordas que te conté que llega mi primo de España el sábado a la mañana? Y no lo iba a dejar en banda en su primera noche en el país.
-Claro, te entiendo. Pero por suerte la fiesta es el viernes así que no tenes excusa para faltar.
-No -Rió-. Además ya te prometí que iba a hacerte el aguante.
-¡Sos la mejor!
-Nos vemos en un ratito, me voy a preparar algo para comer. Después seguimos chusmeando ¡Besos! -se despidió.
-Un besito -alcance a responderle antes de que ella cuelgue.
Volví al patio para trasladar mi desayuno a mi habitación, así mientras terminaba mi vaso de leche podía elegir que me iba a poner ese día. Cuando llegue bajo el pino encontré el vaso sin contenido alguno y nada más que dos de las cinco galletitas que me había llevado. Sonreí y levante la vista para buscar a Luca, mi perro, un golden dorado, y lo encontré al fondo del patio terminando una de las galletitas que me había robado.
- ¡Luca! -lo llame de un grito y él me miró- ¿Qué hiciste? -Intenté hacerme la enojada pero me causaba gracia que me hubiera robado el desayuno -¡Vos tenes tu comida nene! - Se acerco a mí y apoyo su cabeza en mi rodilla, buscando mimos- ¡Ay! Me podes. Hermoso- le abracé y bese, y luego de mimarlo un rato entre a la casa.
No intenté prepararme otro desayuno, solo comí las dos galletitas que mi perro no había llegado a robar, ya que en un rato tendría que prepararme el almuerzo.
Al entrar a mi habitación corrí las cortinas y abrí la ventana para dejar entrar aire. Desenchufé mi celular que ya estaba con la batería cargada y al darme vuelta para dirigirme hacia el placar y elegir mi ropa, me detuve a observar una foto que había colgado en la pared hace unos meses: en ella me encontraba junto a todos mis compañeros de colegio en el cerro catedral, en Bariloche, ¡qué lindo viaje de egresados habíamos tenido!
Era muy raro pensar que ya no volvería a pisar el colegio. Los cambios en este momento de mi vida me daban alegría pero miedo a la vez, más que nada miedo a lo desconocido, o miedo a crecer. La vida nos va enfrentando a distintas cosas y cada vez más complejas, creo yo, a medida que crecemos. Igualmente hacía años que sabía que quería hacer y ya había empezado mi camino en el modelaje; por suerte me estaba yendo bastante bien, ahora me dedicaría más de lleno a ello.
Como mi papá quería que estudie algo, que tenga un titulo y ya que también me interesaba el diseño de indumentaria, en marzo comenzaría a cursar esa carrera, mientras trabajaba como modelo.
Ya me estaba poniendo melancólica así que deje de observar la foto y de pensar en lo que estudiaría, recién comenzaba enero y tenía que disfrutar estas vacaciones con mis amigas antes de ponerme a estudiar o conseguir alguna nueva campaña que hacer.
Pase percha por percha para ver todo lo que tenía colgado en mi placar hasta que decidí por algo. Debajo me puse el traje de baño, seguramente en el club nos meteríamos a la pileta. Me puse un poco de perfume antes de salir, siempre me gustaba oler bien, tener olor a limpia.
Me termine de preparar y también deje listo el bolso con las cosas que llevaría al club, salí de mi habitación y me dirigí a la de mi hermano una vez más, esta vez entre e intenté despertarlo llamándolo en susurros para tampoco sobresaltarlo, pero como no respondía le hable un poco más fuerte y él me arrojó una almohada.
-¡Ey! ¿Qué haces pendejo? -me quejé mientras le volvía a arrojar la almohada.
-Sos molesta, eh. Quiero dormir -me respondió con la voz ronca y tapándose la cabeza con la sábana.
-Son las doce del medio día ya, y te vengo a avisar que ya me voy a hacer la comida porque a las dos tengo que estar en lo de Zai para ir al club -le dije mientras me dirigía hacia la puerta para salir, si no quería levantarse se tendría que cocinar él solo más tarde.
-¿Me dejas comida? -pidió poniéndome ojitos de pollito mojado.
- Ni loca. Come conmigo o sino cocinate después -salí y cerré la puerta.
-¡Mala! - me gritó desde adentro.
Nuevamente en la cocina, abrí la heladera y comencé a buscar algo que inspirara mi instinto cocinero, que debía admitir que no era de los mejores. Encontré unas milanesas ya rebosadas y alguna verduras. Ese seria el menú entonces. Cuando me di vuelta, luego de poner las milanesas en el horno, me encontré con Gonzalo, con shortcito de fútbol y todo despeinado.
-Me levanto solo porque me llamó Matías para ir al club -lo vi sentarse en una de las banquetas y apoyar su cabeza en la barra luego de bostezar- y bueno, también porque ni ganas de cocinar.
-¡Que ojeras tenes! ¿Hasta qué hora te quedaste jugando a la Play anoche? -lo indagué mientras me acercaba a él con un vaso de jugo fresco para ofrecerle.
- ¡Que policía! Que te importa. -me contestó.
- Como digas -contesté yo riendo-. Tomá - le acerque el vaso y lo tomó al instante.
- Gracias - me sonrió - yo también voy al club, pero me pasa a buscar Mati a las tres.
- Bueno, ahora le tenemos que avisar a mamá.
Cuando terminé de decir eso el teléfono comenzó a sonar y al ver, en el identificador de llamadas, de quién se trataba me reí y le dije a Gonzalo "hablando de Roma."
- Hola ma.
-Pau, ¿todo bien? Ya desayunaste?
-Si, ya estamos levantados. Estoy cocinando -le dije mientras sacaba el plato con las milanesas y las acomodaba en una fuente para el horno.
-Ah, muy bien. Gonza también se levantó?
- También, esta acá, conmigo. De Delfi no sé nada, ¿tengo que llamar yo a la casa de Guada?
-Si, por favor, fijate.
-Bueno, ahora veo. Con Gon nos vamos al club. Yo con Zai y Flor, y él con Mati -le informé.
-Bueno, si Del vuelve dejenla con la abuela. ¿Tienen plata?
-Si, tenemos plata. Ahora ubico a Del.
-Dale Pau, gracias. Nos vemos.
-Nos vemos más tarde ma. Besote -le respondí y dejé el teléfono sobre la barra y le pedí a Gonza que llamara a Delfi para ver que iba a hacer, seguro tendría que ir a buscarla antes de irme al club. Mientras las milanesas se terminaban de cocinar preparé la ensalada y serví todo en la mesa que mi hermano había preparado en el patio de casa. El calor nos ponía de buen humor a ambos por lo que almorzamos entre risas. Él ya tenía 16 años pero seguía siendo mi bebé y lo consentía mucho, ni hablar de cómo era con Delfi, ella era la más mimada de toda la familia y la bebé de todos, a pesar de ya tener 10 años.
Luego de lavar los platos y una mini guerra de agua con Gonza mientras lo hacíamos, me dirigí en un remis a buscar a Delfi y la deje en la casa de mi abuela que vivía al lado nuestro, se quedaría allí como cada vez que todos salíamos de casa. Volví a mi habitación en busca de mi bolso, salude a mis hermanos, a mi abuela (mi abuelo ya dormía la siesta), y partí hacia lo de Zai.
Caminé con los auriculares puestos mientras escuchaba o tarareaba las canciones que pasaban en mi radio favorita. El camino se me hizo rápido, toque el timbre de la casa de Zaira y a los pocos minutos la morocha abrió la puerta, muy sonriente. Se dirigió hacia la reja, también la abrió y me abrazó con alegría como si hiciera un mes desde la última vez que nos vimos.
-¡Hola Pocha! -se separó y me miró a los ojos al saludarme.
-Hola Zaichu. ¿Todo bien? -le sonreí, la llamaba así desde que nos habíamos hecho amigas en la primaria.
-¡Genial! Muy esperanzada. -Me guiñó un ojo y señaló con su cabeza hacia la puerta de la casa. Allí pude ver a su papá que nos saludaba. Le hice un gesto con la mano y salimos.
-Que efusivo saludo, seguro que es porque cierta persona va al club, ¿no? -le dije en un susurro y reí cuando ella me codeo para que callara ya que su papá todavía nos podía escuchar -más feliz no podes empezar las vacaciones -le dije más cerca del oído para que no nos escuchara nadie y ella se ruborizó un poco.
Emprendimos camino al club y a las pocas cuadras se unió Florencia, como ya habíamos arreglado. Mi novio, que era habitué del club se puso contento cuando le mande un mensajito contándole que iba a pasar el día allí y me pidió que nos encontremos al lado de los quinchos.
Llegamos a la puerta y con el carnet de socio en mano nos dejaron pasar, parecía un chiste, desde chiquitos que veníamos y siempre estaba el mismo guardia en la puerta, ya nos conocía bien e igualmente teníamos que identificarnos con el carnet. Mientras caminábamos hacia la secretaría para pagar el día de pileta se me ocurrió enviarle otro mensaje a mi novio avisándole que ya estaba en el club y ver si el también había llegado. La respuesta fue casi instantánea y me descolocó con lo que me escribió: "date vuelta". Hice lo que me pedía y lo vi a él caminando hacia nosotras.
- ¡Hola gordo! - grite y corrí para abrazarlo.
- Hola hermosa, ¿Cómo estás? -me abrazó y besó.
- Todo bien, ya intentando tomar dimensión de todo lo que te voy a extrañar desde este viernes -hice puchero- ¿te vas a portar bien, no?
- Por supuesto. ¿No confías en mí? -se hizo el canchero.
- Mmm -me hice la pensativa pero después sonreí- si, obvio -le dije y lo besé.
------------------------------------------------------------------------------------------------
Aquí les dejo el primer capitulo, espero que les guste mi idea y me acompañen en el desarrollo de ella. AYY EXTRAÑANA SUBIR!!! Jajajaja!
Gracias por leer.
AVISO: No voy a subir todos los días como hacía con vuelteros pero sí una vez por semana, es una nove más corta que Vuelteros y con capitulos más largos, por eso.
Bueno, nos leemos pronto.
Felices fiestas a todos!! ♥♥♥
QUiero vuelteroooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooos :'( Vuelteros 2 (?) Abuuuu no me hagas estoooo..... Vuelteros PAZEOM
ResponderEliminarMe encanto amigaaa!! Espero lo que sea necesario para leer el proximo
ResponderEliminarGracias Joha!! Ya estoy contenta yo con la nove jaja
EliminarQué lindo cap, ya me gusta la nove jaja
ResponderEliminarGracias silll!!
EliminarMe gusto muxho este primer capitulo.. :) espero el peoximo..
ResponderEliminarGracias Floor ☺♥
EliminarAgos: que linda parece que va a estar esta historia! Me encanta como escribis, extrañaba leerte. Fuiste a la primera que empece a leer! Recien vi en el blog, tu otra nove "Vuelteros" y me agarro nostalgia. Capaz la leo de nuevo.
ResponderEliminarCon respecto a esta, ya me atrapo la historia y me estoy imaginando que Pedro es el primo de Zai?? Y no creo que Pau se porte tan bien cuando se vaya el novio. Estoy en lo correcto???
Feliz Navidad! Pasalo lindo!
Besos
Veremos, veremos!! Jajaja.
EliminarMil gracias por leer y coparte tanto con misideas. Gracias!!
Felices fiestas!
Lindo cap :) Subi más
ResponderEliminarGracias tontita ♥ jajaja
EliminarAgos, qué lindo primer capítulo, aunque con muchas dudas! Será Pedro el primo de Zai? Su novio se va el viernes y él llega el sábado, eso ya es bueno! ajjajajajaja
ResponderEliminarUna nove que promete mucho, ya espero ansiosa el próximo capítulo, yo extrañaba que vos subas! jajaja
Un beso grande!!
Gracias Lu! Esta gente que se le da por viajar. Veremos qué pasa con los viajeros.
EliminarBesoss!!
me encanta agus ijala sea tan linda como vuelteron pasamela cuando subas @rociibell23 besos
ResponderEliminarmuy bueno el 1er capítulo,seguí subiendo...
ResponderEliminar